La menopausia sigue siendo uno de los grandes misterios de la naturaleza y muy pocas especies tienen un período prolongado de vida, luego de pasar por la etapa reproductiva, como ocurre en los seres humanos. Las orcas (Orcinus orca) dejan de reproducirse entre sus 30 – 40 años, pero pueden sobrevivir hasta los 90 años.
Las razones de la menopausia son aún un misterio pero, en el caso de las orcas, la mayor esperanza de vida de las madres ayuda a alargar la de sus hijos. Así lo demuestra un curioso estudio publicado en la revista Science.
El equipo de investigación, pertenece a las Universidades de Exeter y de York (Reino Unido), el Centro de Investigaciones de Ballenas (Center of Whales Research de EE.UU.) y la Estación Biológica del Pacífico (Canadá). Analizaron 36 años de registros demográficos y modelado estadístico sobre poblaciones de orcas, del norte del Océano Pacífico. Los investigadores llegaron a la conclusión de que la presencia de una hembra que ya no se reproduce, aumentó significativamente la supervivencia de su descendencia. En el caso de los machos mayores de 30 años, la muerte de la madre significó un aumento de 14 veces en la probabilidad de su muerte, dentro de un año.
No te pierdas el siguiente video realizado por Centro de Investigación de Ballenas (Center for Whale Research)
Las orcas viven en grupos sociales inusuales, con hijos e hijas que se quedan con sus madres en un solo grupo a lo largo de sus vidas. Con esta estrecha relación, las madres mayores tienen la oportunidad de aumentar la transmisión de sus genes ayudando a sus hijos adultos a sobrevivir y reproducirse. Cuando sus hijos forman pareja, su descendencia es cuidada por las mujeres del nuevo grupo. Según el estudio, las hembras permanecen junto al grupo de su madre, pero en el caso de las hijas de la misma edad, la probabilidad de morir solo aumenta en tres veces, por lo que el deceso de la progenitora “no tiene efectos en sus tasas de supervivencia”.
A pesar de confirmar la importancia de la madre en el cuidado a largo de plazo de los jóvenes macho, los expertos desconocen cómo su presencia contribuye a aumentar su esperanza de vida. “Algunas observaciones sugieren que las madres ayudan a sus hijos a buscar comida y les apoyan durante encuentros agresivos”, subraya Darren Croft, jefe del grupo de investigación.
Fuente:
Referencia Bibliográfica:
-Emma A. Foster, Daniel W. Franks, Sonia Mazzi, Safi K. Darden, Ken C. Balcomb, John K. B. Ford, Darren P. Croft. “Adaptive Prolonged Postreproductive Life Span in Killer Whales” Science vol 337 14 de septiembre de 2012.